Somos un Centro psicológico especializado en el tratamiento de la depresión en adultos. Reconocemos que la la depresión puede manifestarse de diversas formas y afectar profundamente la calidad de vida de quienes la experimentan.
Nuestro equipo de psicólogos expertos está dedicado a proporcionar un ambiente de apoyo y comprensión mientras trabajamos juntos para abordar las causas subyacentes de la depresión y desarrollar estrategias efectivas para manejarla. Utilizando técnicas terapéuticas basadas en la experiencia y desarrollo, estamos comprometidos a ayudarlo a superar los desafíos que pueden presentarse con la depresión y en su día a día. Estamos aquí para brindarle el apoyo necesario para recuperar el control y vivir una vida más tranquila y satisfactoria. Confíe en nosotros para acompañarlo.
MÁS SOBRE Depresión
El estar “deprimido” es un término que suele utilizarse con frecuencia cuando un sentimiento de tristeza o pesadumbre nos embarga, causado por una situación difícil que atravesamos. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la depresión como tal, es un trastorno afectivo de alta incidencia a nivel mundial. De hecho, de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud, a principios del año 2021 se calculaba que más de 350 millones de personas la padecen en el mundo.
Diferencia entre tristeza y depresión
Así, es preciso diferenciar entre estar triste y tener un trastorno depresivo. Si bien ambos tienen en común un sentimiento de pena, culpa, pesadumbre por una situación vivida, la tristeza suele ser pasajera y disminuir sin ayuda profesional. Por su parte, la depresión debe ser diagnosticada por un profesional de la salud, haciendo uso de la entrevista, pruebas psicológicas, así como el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-V), tomando en consideración la duración del sentimiento y la disminución de capacidad o interés en distintos aspectos de la vida diaria.
¿Cuáles son los síntomas de la depresión?
- Sentirse triste, vacío, sin esperanza, la mayor parte del día, casi todos los días (durante las últimas dos semanas).
- Pérdida o disminución del interés en realizar actividades que solían interesarle. Como si hubiera perdido la capacidad para sentir placer.
- Sentimiento de culpa o inutilidad excesivos, respecto a la situación que motiva la depresión.
- Fatiga, pérdida de energía para las actividades cotidianas. Suelen tener menos actividad incluso dentro de la casa (como estar en cama por largas horas durante el día) o en ocasiones, se puede observar exceso de actividad.
- Dificultad para concentrarse, pensar o tomar decisiones.
- Puede haber pérdida de peso, insomnio y/o pensamientos de muerte.
La depresión, así, es un sentimiento profundo, intenso que acompaña a la persona deprimida y le hace verse a sí mismo, al mundo y al futuro de una manera negativa, sin esperanza, sin solución. Es muy importante recalcar que cada caso tiene sus propias características, por lo que es importante acudir a consulta para que el psicólogo mismo sea quien valore y diagnostique (la entrevista es la herramienta más importante para el diagnóstico), y brinde las herramientas terapéuticas necesarias para la mejora.
¿En qué consiste la terapia para la depresión?
La terapia para la depresión consiste, primero, en explorar las causas que la han motivado, las cuales pueden variar, de acuerdo a cómo la persona valora las situaciones que le suceden. En dicha exploración, se encuentran pensamientos distorsionados que no le permiten a la persona deprimida, ver alternativas de solución. En un segundo momento, los patrones de pensamiento se analizan y, mediante un cuidadoso trabajo terapéutico, se reemplazan por nuevos pensamientos, se entrena en habilidades para resolver problemas y afrontar situaciones difíciles, lo que le permitirá ir superando la depresión, lo cual se da de manera progresiva, en una alianza entre el psicólogo y quien requiere la ayuda profesional psicológica, donde se establecen ejercicios, metas, actividades reforzantes y revisión y supervisión constantes de los logros que se van alcanzando, para hacerlos perdurables en el tiempo.
Es importante comprender que mientras más tiempo se demore en buscar ayuda, mayor tiempo se sufre y las ideas negativas cobran mayor fortaleza, haciendo más difícil la situación. Por el contrario, acudir a consulta psicológica como primer paso, ya es el inicio del cambio.